¿Y si pudieras reescribir tu destino?
Durante años me sentí atrapada.
Por más que cambiara de trabajo, de ciudad o de relación, algo se repetía en mí.
Un malestar físico aquí, una sensación de vacío allá, la misma herida de no sentirme suficiente volviendo una y otra vez…
Y en medio de todo eso, la pregunta:
¿Por qué me pasa esto otra vez, si se supone que ya lo trabajé?
Hasta que entendí algo tan simple y tan profundo que me dio la vuelta entera:
Tu destino no cambia si tú no cambias tu conciencia.
Tu historia no se transforma si no decides tomar las riendas de lo que estás viviendo.
La semana pasada tuve el placer de ser entrevistada por Mindalia.com, y hablamos justo de esto:
Cómo reescribir tu destino desde la conciencia.
Y quiero compartir contigo esa entrevista, porque sé que puede darte claves que quizás llevas tiempo buscando.
¿Qué vas a encontrar en la entrevista?
Por qué repetimos patrones que no entendemos.
Qué papel juegan los síntomas físicos en ese proceso (sí, el cuerpo habla… y grita cuando no lo escuchamos).
Cómo identificar cuándo estamos en el autosabotaje y cómo salir de ahí sin castigarnos.
Qué significa realmente empoderarte .
Por qué no se trata de «culpa», sino de responsabilidad consciente.
Y cómo hacernos cargo de lo que sentimos, lo que vivimos y lo que elegimos.
Porque reescribir tu destino no es cambiar lo de fuera.
Es cambiar cómo tú te relacionas con lo que te pasa.
Es dejar de reaccionar desde la herida para empezar a responder desde la verdad.
Es mirar hacia dentro con honestidad, con compasión y con decisión.
Y eso requiere valor.
Pero también te devuelve la libertad.
¿Te sientes atrapado/a en un bucle emocional o físico que no sabes cómo romper?
¿Tu cuerpo te está hablando, pero no entiendes qué quiere decirte?
¿Sientes que hay algo más para ti, pero no sabes por dónde empezar?
Entonces esta entrevista puede ser interesante para ti.
Una charla desde el corazón, con verdad, con el deseo profundo de que más personas despierten a su propio poder.
Regálate este rato.
Escúchala con el alma abierta.
Porque a veces una sola frase, escuchada en el momento justo, puede encender la chispa que cambia tu camino.
Y recuerda:
El destino no es una condena.
Es una oportunidad de volver a elegir.
Y siempre estás a tiempo de elegirte
